Treinta y tres ascensiones, de las cuales, una en pleno invierno; ciento cincuenta noches sobre esta montaña, una sobre la cima, dos sobre el collado de Cernillona (3205m.), y el resto (ciento cuarenta y siete) en mis cuevas.
Així comença Henry Russell el capítol dedicat a la muntanya del Gran Vignemale al seu llibre ” Recuerdos de un montañero “, mig guia de muntanya, mig autobiografia. Continua llegint